Un compost es un abono que se consigue gracias a la transformación de la materia orgánica por medio del compostaje. Este sirve para el cuidado de jardines y plantas, haciendo más fértiles los terrenos y logrando suplantar a los plaguicidas y fertilizantes químicos, reduciendo el impacto negativo que estos productos generan en el medio ambiente.
>Lee también: Aprende a hacer una bolsa reciclada súper útil y original
Esta vez, te ensañaremos cómo realizar un compost casero para que tú también contribuyas con el cuidado del planeta, de forma sencilla y sin mayor inversión, solo deberás sacar provecho de algunos desechos que produces diariamente. Te contamos paso a paso cómo lograrlo, de acuerdo con la guía desarrollada por la asociación ecologista Amigos de la Tierra.
- Arma tu compostador. Ubica un espacio dentro de tu casa en donde colocarás un contenedor, caja o recipiente, en el que recolectarás todos los desechos orgánicos que vayas generando. Una recomendación es que la primera capa que pongas sea de tierra y en la siguiente utilices ramas secas, paja u hojas que recojas al limpiar tu jardín.
- Separa tus residuos. Al tener el compostador y la base antes mencionada, es momento de incluir los residuos, que pueden ser sobras de frutas y verduras, como semillas y cáscaras, huevos, flores, plantas, corcho, servilletas de papel, aceite, vinagre, restos de café o infusiones. Es importante saber que en esta mezcla no podemos añadir carnes, huesos o pescados, ni cualquier material no orgánico.
- Cuidado y mantenimiento. Es necesario remover de vez en cuando el contenido dentro del compostador y regarlo, para que así pueda originarse el fertilizante natural. Al humedecer este espacio se debe cuidar el no usar agua en exceso, ni generar un charco; solo se debe colocar la cantidad necesaria para que se mojen todas las capas de residuos.
- ¡Listo para usar! El tiempo aproximado que dura el proceso de transformación de los materiales es de 6 a 8 meses. A partir de este período se puede comenzar a extraer el compost casero del fondo del contenedor. Una señal de que está listo el abono es que tendrá olor a tierra de bosque. Lo ideal es dejar reposar unos días la parte que hayas tomado, antes de ponerla en tus plantas.
>Lee también: Vivir sin generar basura
Nota patrocinada por Diariamente Ali