¿Cuántas veces nos hemos sorprendido, actuando de otra manera de la que habíamos quedado en un inicio? Y, cuántas otras veces… ¿nos hemos decepcionado por los resultados o por actuar sin respetar lo que realmente queremos? Y es que, muchas veces sabemos que lo estamos haciendo mal y caemos en un círculo de patrones repetidos. ¿Cuántas veces tenemos que fallarnos para entender que somos nuestras acciones y no lo que decimos?
Cuando estas acciones son dominadas, sobre todo por las emociones, solemos buscar lo fugaz, solo queremos calmar la ansiedad y somos reactivos. Actúa nuestro ego. Entonces ¿Cómo resuelvo o termino este patrón repetido? Debemos ser sinceros con nosotros mismos y sentarnos a entablar una conversación muy seria, de por qué no estamos siendo coherentes.
Entiéndase coherencia como: la relación lógica entre dos cosas o entre las partes de modo que no se produce contradicción ni oposición entre ellas.
¿Cuáles son los puntos que debo considerar?
- ¿Qué estamos priorizando antes que a nosotros?
- ¿Por qué dejamos de hacer lo correcto?
- ¿Cuáles son los valores bases con los que estamos actuando?
- ¿Estamos siendo íntegros?
- ¿Por qué ponemos en riesgo la mejor versión de nosotros mismos?
Una vez formuladas estas preguntas para entender nuestra situación personal, es bueno que comencemos a tener un concepto de nuestra persona.
“Definirnos en primera instancia, antes que alguien lo haga por ti, es explorar internamente. Ser sinceros y decir cuáles son nuestras fortalezas y debilidades para dar paso la claridad, el enfoque, la coherencia”.
Esto nos ayudará a tomar decisiones y el control de nuestras emociones, para priorizar el cómo queremos ser recordados y cuáles serán las acciones que nos ayudarán a trascender.
Aceptando humildemente que no somos perfectos, que estamos en proceso de reinvención constante, que cometemos errores como los demás; sin embargo, observamos, no nos salimos del tiempo para tapar la realidad, nos hacemos cargo y actuamos. La coherencia entre lo que hacemos y decimos, deben ser siempre claros para no dar paso a la conjetura o a la ambigüedad. Apoyarnos en pilares como: el amor, la integridad, sinceridad, templanza, ecuanimidad, justicia, empatía, veracidad, respeto y disposición son una buena alternativa.
Y no importa si todavía no es así. La oportunidad la encuentras en el ahora. Siempre es buen momento para encontrar tu versión más power. Tener más conciencia sobre quién se es, desde el amor. Atrayendo el cambio hacia nosotros. Confiando en que lo mejor está por llegar sobre todo porque actúo y no me quedo sentado esperando que pase el tiempo, en medio de la comodidad, para luego echarle la culpa a otros o poner excusas. Me hago responsable de mi vida y como todo un caminante, me voy haciendo camino al andar. Haciendo lo necesario, soltando los viejos paradigmas y dando paso al cambio, la adaptación de manera resiliente, con coraje. Como toda una ¡Persona Power!
- Enlace de post en LinkedIn sobre la coherencia AQUÍ
- Web Coaching Power
- LinkedIn Ana Romero
- Contacto: equipo@mycoachingpower.com Ventas@mycoachingpower.com