Conoce la importancia de la actitud en la atención al cliente de tu restaurante.
Entrar a un restaurante y no sentirse a gusto con la atención es lo peor que nos puede pasar. Sin importar lo caro o lo económico que sea, el negocio culinario no debe olvidar que para lograr una clientela fiel y seguir creciendo, debe tomar atención a la actitud de su personal a la hora de atender a los comensales. ¿Por qué? ¡Lee la siguiente nota y haz que más personas regresen!
>LEE: Los platos que no deben faltar en el menú de tu restaurante
Debes saber que el servicio al cliente empieza por los colaboradores, por lo que dependerá en buena parte de su preparación y actitud a la hora de desempeñar su cometido. Ya sea en la cocina, sirviendo mesas, atendiendo en la barra, en recepción o haciendo cualquier otra labor, una buena actitud sumada a una adecuada formación y coordinación serán la fórmula del éxito.
Si logras que tus colaboradores demuestren tener la mejor actitud en los puntos clave, conseguirás beneficios como los siguientes:
1. Dar una buena primera y última impresión
Cuando el personal que acoge y despide al cliente tiene una actitud que transmite calidez y profesionalidad, el cliente responderá de forma positiva. La recepción y la despedida son los momentos clave a cuidar para establecer una relación satisfactoria con la clientela a futuro.
2. Clientes más comprensivos con los errores
Si surgen problemas de retraso por falta de mesas, a la hora de servir o por cualquier otro incidente, una actitud amable y proactiva ayudará a que el cliente tenga más paciencia ante posibles errores. Solo así podrá olvidar la incidencia y disfrutar de una mejor experiencia culinaria.
3. Predisposición para el trabajo en equipo
Un servicio de calidad es resultado de un trabajo en equipo bien hecho y la predisposición a realizarlo es fundamental para coordinar las diferentes tareas y roles que intervienen en la prestación del servicio.
4. Mayor productividad
Si tus colaboradores están motivados tendrán un especial interés en buscar compensaciones en su trabajo relacionadas con la satisfacción del cliente. La buena actitud se traducirá en acciones concretas (una buena acogida y despedida, adelantarse a las necesidades del cliente, saber reaccionar ante los imprevistos, etc.) para que sean más eficientes en el desempeño de su trabajo.
5. Diferenciarse con un toque especial
Una buena actitud también implica conocer detalles que pueden parecer irrelevantes pero que, en realidad, marcan la diferencia y ayudan a tener clientes satisfechos. Entre otros, por ejemplo, conocer los ingredientes de los platos, su modo de preparación o composición, para así poder hacer sugerencias y responder a las preguntas de tus comensales
No te pierdas el próximo PQSresponde: cómo promocionar tu negocio gastronómico. ¡Conéctate este martes 24 de 2 p.m. a 3 p.m. y haz tus consultas en vivo!
Vía: menorquina.com
>LEE: ¿Tienes un restaurante? Revisa estos consejos para fotografías irresistibles